Sanando el corazón

1 Samuel 10:6
Entonces el Espíritu de Jehová vendrá sobre ti con poder, y profetizarás con ellos, y serás mudado en otro hombre.

Tengo mucho de no escribir.
Esta mañana quiero compartirte sobre lo que significa "ser mudado en otro hombre".

La mayoría de personas creemos que seríamos felices si todo lo que pasara estuviera bajo nuestro control y que las cosas sucedieran de acuerdo a nuestro propósito o beneplácito. Creemos que la gente nos hiere o se equivoca haciendo las cosas que ellos creen correctas hacer o las que Dios les ha dicho que hagan. Pero claro, esto va en contra de nuestra filosofía de vida, todos deberían de actuar como yo digo o quiero que actúen, porque de esa manera soy feliz jajajajajaja no podemos estar más equivocados!!! Y lo más impresionante es que creemos que no pensamos así, pero nos molestamos y enojamos cada vez que alguien nos hiere o nos lastima o hace algo que, según nosotros, no debía hacer.

Para que esto no suceda y nuestro ánimo no dependa de la gente, necesitamos ser mudados en "otros hombres", en "otras mujeres", para que cuando estas cosas sucedan, no nos molesten. La palabra de Dios dice que el hierro forja al hierro y el hombre al hombre! Aceptemos a las personas tal cual son, ellos han sido puestos en mi camino para forjar mi carácter, para forjar al hombre, para forjar al amigo, para forjar al siervo, en fin, para forjar mi vida en todas las áreas en las que me desenvuelvo. Entender que las personas son como son y amarlas así, es el principio de ser "otro hombre" u "otra mujer". Como me dijo un sabio hombre de Dios, el amado Pastor Vladimiro Vásquez hace muchos años, "uno debe amar a las personas, no las cosas que esas personas hacen". Es decir, sin importar qué hagan, debemos amarlos y perdonarlos.

Que el Señor bendiga tu vida y ojalá pudieras comenzar a perdonar y a amar a pesar de.....

Gega

Hasta la mitad del reino se te dará!!

Ester 5:1-3
Aconteció que al tercer día se vistió Ester su vestido real, y entró en el patio interior de la casa del rey, enfrente del aposento del rey; y estaba el rey sentado en su trono en el aposento real, enfrente de la puerta del aposento. Y cuando vio a la reina Ester que estaba en el patio, ella obtuvo gracia ante sus ojos; y el rey extendió a Ester el cetro de oro que tenía en la mano. Entonces vino Ester y tocó la punta del cetro.
Dijo el rey: ¿Qué tienes, reina Ester, y cuál es tu petición? Hasta la mitad del reino se te dará.

Me duele mucho pensar en el lugar que muchas mujeres ocupan al día de hoy en sus hogares, pero me duele más pensar en el lugar que muchas mujeres ocupan en el corazón de sus esposos. Te has puesto a pensar alguna vez ¿qué lugar ocupas en el corazón de tu esposo? Te has puesto a pensar ¿cuánto significas para él?

Me duele pensar que muchas mujeres han tenido que hacerse duras y fuertes, en cuanto a sentimientos, para poder sobrevivir en las arenas profesionales y sociales llenas de hombres machistas y de mujeres que por cultura creen que la mujer tiene que luchar por darse un lugar. Cuan equivocados estamos!!!. La mujer no tiene que luchar por que le den su lugar, el lugar que te corresponde no se conquista ganando batallas de poder ni de gritos ni mucho menos de sueldos; el lugar que tu como mujer te mereces, se obtiene por medio de la delicadeza que te caracteriza como una dama. Ese lugar se obtiene pidiéndolo a quien te lo puede dar: Al Señor!!!

Cuando tú te das cuenta del lugar que Dios te da, cuando tú te das cuenta de la forma en la que El Padre te trata, te mima, te protege, te provee y te cuida, es entonces y solo entonces que te das cuenta del lugar que tu esposo te debe dar, no para ir y exigirlo a gritos o pleitos, si no para comenzar a sembrar en tu esposo lo que quieres cosechar de él. La Palabra de Dios dice que la semilla es incorruptible, es decir, si siembro maíz, maíz tengo que cosechar. Si siembro tomates, no hay forma que me salga un naranjo del suelo.

¿Cuánto tiempo tienes de no tratar a tu esposo como tú quieres que él te trate?
¿Cuánto tiempo llevas exigiendo y demandando un buen trato y no lo recibes???
¿Hace cuánto tiempo te volviste en una fuerza laboral más que provee para la casa?
¿Hace cuánto no recibes un gracias por tu esfuerzo? Y eso que poca gente sabe las cosas que te toca pasar(aguantar) en el trabajo, solo tu las sabes!
¿Hace cuánto pides a gritos un abrazo, una caricia, un brazo fuerte que te sostenga cuándo necesitas ser débil?

Por eso repito lo hermosos versículos del libro de Ester: Dijo el rey: ¿Qué tienes, reina Ester, y cuál es tu petición? Hasta la mitad del reino se te dará.

Vé con tu esposo, si tienes la dicha de tenerlo aún, vé y ámalo, demuéstraselo, enséñale lo agradecida que estás con Dios por tenerlo y mira si eso no lo derrite en tus brazos. Dale gracias por su esfuerzo, míralo a los ojos y dile que aprecias cada cosa que ha hecho y aún lo que no ha hecho, porque eso ha forjado tu corazón. Dile las palabras que tanto el necesita oír de tu boca, no de la nadie más!! Dile que lo amas y que lo respetas por lo que es: Tu esposo!
Te aseguro que poco a poco comenzarás a oír: Dime mi reina, pide lo que quieras, hasta la mitad del reino te daré!!!
Alguien tiene que dar el primer paso, ¿por qué no lo das tu?

Que el Señor te bendiga. Te amamos.

Gega y Kenny González

Destruyendo Su imágen

La biblia dice lo siguiente:
Génesis 1:27
Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó

Es muy triste ver hoy en día, en los matrimonios actuales, el concepto que uno tiene del otro. Es triste ver cómo la mujer se expresa de su esposo y cómo el esposo se expresa de su esposa. La burla y las bromas pesadas son el día a día del trato conyugal. Faltas de respeto, faltas de muestras de aprecio, enojos y mucha cosas más son parte del desayuno, almuerzo y cena de los matrimonios de hoy.

Es triste ver como las circunstancias dentro de la vida matrimonial van en detrimento de la relación en lugar de fortalecerla. Y es que no hemos aprendido a vivir juntos. Cada uno sigue tratando de vivir su vida y doblegar la otra.

Nosotros los hombres, hemos perdido de vista la opinión que nuestras esposas tiene de nosotros y poco hacemos por cambiarla, es más, pareciera que mientras peor concepto tenga, más "machos" somos... que equivocados estamos!!!!

¿De qué hablan las mujeres casadas con sus compañeras en la oficina?
¿Qué dicen ellas mismas de sus esposos?
¿Qué imagen crean de nosotros en los demás?

Buenas preguntas con respuestas contundentes. Es correcto, crean en los demás la misma imagen que ellas tienen de nosotros.

¿Qué hacemos nosotros los hombres?
Exactamente lo mismo. Destruimos por completo la imagen de Dios en nuestra esposa y ya no vemos lo bueno, si no que solo lo malo. Y resulta que en general, nuestro concepto de nuestra pareja es muy bajo, resultando que el problema sea que cualquier persona sale siendo mejor.

¿Desde hace cuánto no elogias algo bueno que hace tu esposo?
¿Desde hace cuánto no elogias algo bueno que hace tu esposa?
¿Desde hace cuánto no le dices: " Que bonita vas!!"?
¿Desde hace cuánto ya no le preguntas su opinión a tu cónyuge?
¿Desde hace cuánto la opinión de los demás pesa más que la de tu esposa?

Quiero pedirte que detengas tu marcha un momento y aprecies las cosas buenas que tiene tu cónyuge. Que aprecies la buena forma en la que tu esposa te atiende, el cariño con el que prepara tu ropa, el amor con el que te espera cada noche y que comiences a devolver ese mismo cuidado y ese mismo aprecio. Te aseguro que tu esposa se quedará impactada y se preguntará: ¿qué te pasó?

Ponle esfuerzo a tu matrimonio, no es bueno que el hombre esté solo, eso dice la Palabra de Dios!
Te amo, que el Señor te bendiga

gega

Aprendiendo a ser padres!!!

En el capítulo 41 versículo 50 de Génesis encontré lo siguiente:
Y le nacieron a José dos hijos antes de que llegaran los años de hambre...

Mi primera pregunta fue:
¿Por qué le nacieron los hijos justo antes de la hambruna que habría en la tierra?

Siete años de hambre estaban por venir, toda lógica diría que no era el mejor tiempo para tener hijos. Solo imaginen, los primeros siete años de vida son vitales para la formación del carácter de una persona y los hijos de José iban a pasar esos primeros siete años en un ambiente de escasés extrema y no local, global.

¿Por qué José no se espero a que pasaran los siete años de hambre para tener hijos?

Me impresiona lo que el hombre es capaz de hacer cuando está alineado con la voluntad de Dios. Y es que resulta que la respuesta a todas mis preguntas es más sencilla de lo que me imaginé: José sabía lo que iba a pasar y estaba preparado, como buen padre, para afrontar lo que venía.

¿Qué tan preparados estamos nosotros para proveerle a nuestros hijos lo necesario para su sobrevivencia en los próximos años?

¿Sabemos nosotros lo que pasará en el futuro para que nos preparemos hoy?

Yo creo que si. Es evidente el destino de la humanidad y su perdición sin Dios. Hoy es el día que debo preparme como Padre para poder hacer provisión para mis hijos mañana. La Palabra dice: "Son los padres los que atesoran para los hijos..." además dice también: "Porque el sabio deja herencia a sus hijos y a los hijos de sus hijos después de si".

Por favor, no solo pensemos en lo académico!!! Lastimosamente un título de educación superior no es garantía de éxito en el matrimonio o en la educación de los hijos!!! El respeto de mis hijos no me lo gano por ser Ingeniero, ni Arquitecto, ni Licenciado; me lo gano con el ejemplo de ser un padre obediente a Dios!! Se gana instruyéndolos desde temprano para que aún cuando sean viejos, no se aparten de la enseñanza.

Si tan solo tuviéramos presente que un día nuestros hijos serán esposos y esposas y luego padres y madres, podríamos hoy tomarnos un tiempo para hablar de esos temas tan importantes con ellos. No todo se trata de dinero o status.

Este mundo necesita de padres y madres que sepan lo que pasará en los próximos años y se preparen ellos mismo y a sus hijos, para que puedan sobrevivir a esos tiempos que están por venir.

Por lo menos en el tiempo de José, era el hambre el problema, hoy día, es el hombre!!

por favor, enseñémosles a nuestros hijos a guardar el camino de Dios y a buscar su rostro diligentemente y de corazón voluntario, es la única forma de mantener una buena vida en los tiempos que están por venir.

Que el Señor bendiga tu vida!!
Te amamos
gega

¿Puede amar un hombre?

Muchas personas se preguntan, ¿por qué los hombres son así?
Cuando digo hombres, me refiero al género másculino.
Y es que deseo compartir contigo una verdad que quizás pueda ayudarte.

Un hombre, aunque sea muy dentro de el, tiene características innatas, es decir, propias de el, que no se aprenden, vienen desde el nacimiento junto con el hecho de ser Hombres.

Hoy en día el hombre ha dejado de ser caballeroso, ha dejado de tratar a la mujer como vaso más frágil, ha dejado de ser Papá, ha dejado de ser esposo, ha dejado de ser protector, en fin, hemos dejado de ser HOMBRES. Nos hemos convertido en máquinas laborales capaces de convertir esfuerzo en dinero. Nos hemos convertido en máquinas sociales capaces de hacer amistades superficiales, nos hemos convertido en máquinas de hacer hijos. Nos hemos convertido en máquinas de destrucción del valor de las mujeres con nuestro trato. Ellas han tratado de sobresalir con esfuerzo, títulos, maestrías, dinero, pero amada mujer, por más dinero que tengas y puedas hacer más cosas que tu esposo, eso no te garantiza que tu esposo te trate como te lo mereces. Eso no te garantiza que cuando ganes más dinero que él, automáticamente el te respetará. El respeto no se gana con dinero ni con títulos.

Si algo he aprendido en lo poco que llevo de caminar, es que la mujer recibe de parte del hombre la clase de trato que ella cree que se merece. Si tu te das valor, entonces el te valorará. Si tu te das tu lugar, entonces el te lo dará. Si tu te das a respetar, entonces el te respetará. Si tu te haces amar, entonces el te amará. Si tu te dejas proteger, entonces el te protegerá.

El Hombre no fue hecho para maltratar a la mujer, no, por el contrario, el Hombre es el trampolín que Dios usa para que una mujer se desarrolle en toda su capacidad. El Hombre de verdad es aquel que ayuda a su esposa a alcanzar sus metas, profesionales, sociales, académicas, maternales, etc. Nosotros somos el instrumento que Dios quiere usar para que tu mujer alcances todos tus sueños. Claro, somos el instrumento, Dios es el que nos usa para echarte una mano.

El Hombre de verdad tiene bien claro su papel en la vida de la mujer, por favor, permíteme enumerar solamente algunos.

- El papel de hijo. Este papel es vital, pues de esto depende como se sienta la mujer como madre en muchos casos, principalmente cuando somos adultos ambos.

- El papel de Esposo: El papel de esposo se ha tergiversado tanto que ya no sabemos ni como se hace de esposo. El esposo es aquel Hombre que principalmente AMA y debido a que ama profundamente a su esposa, se esfuerza por: Protegerla, Proveerle, Sanarla, Ayudarla, Entenderla y, entre muchas cosas más, ayudarle a cambiar cuando sea necesario. Amarla lo suficiente como para tomarla de la mano y guiarla a una relación estable, amorosa y llena de comprensión y no de gritos e insultos.

- El papel de Padre. Aquí creo que no me alcanzaría el Blog y la vida para escribir. Nos ha sido dada, como padres, la enorme responsabilidad y el enorme privilegio de moldear la vida, el carácter y el futuro de nuestros hijos, y en este caso, de nuestras amadas hijas. ¿Te has fijado que muchas veces la mujer se casa con un hombre parecido a su padre? ¿Con qué tipo de hombre quieres que se case tu hija? Enséñale con tu ejemplo a escoger bien cuando ella tiene 4,5 o 10 años, sé un buen ejemplo por favor papá. Este papel de padre toma una importancia adicional al estar casado. Habrá momentos en los que la esposa necesitará de un papá y no de un esposo.

Hombre, déjame decirte algo. Amar, cuidar, proteger, proveer, sanar, consolar, comprender, etc. son características inherentes a nuestra naturaleza, solo tienes que usarlas, porque por no usarlas, se han atrofiado.

Despierta amigo y comienza a darle a tu familia el esposo, el padre, el hermano y el amigo que siempre soñaron tener.

Que el Señor te bendiga.